El renovado Museo Café de la Colección Peggy Guggenheim en Venecia recibe a los visitantes del museo dentro de la terraza con vista a los jardines del museo y al palacio que fue el hogar de Peggy Guggenheim durante 30 años, y que se transformó, según sus deseos, en uno solo. De los lugares más preciados dedicados al arte del siglo XX.
Una entrada anunciada apenas por los carteles que conducen por las enruladas calles de Venecia a un ingreso casi privado. Un ventanal que se abre al Gran Canal en el lado opuesto. En medio, la vida construida por la gran Peggy en su escondite del Véneto. Un jardín, su arte, su locura creativa e inspiradora y la calma tentadora del Museum Café.
Hangar Design Group concibió, diseñó y llevó a cabo su renovación del café. El objetivo era crear un espacio relajante y contemporáneo dentro, en armonía con y en memoria del espíritu de Peggy. La atención se centró en la luz natural, iluminando la cafetería a través del jardín y resaltada por un diseño simple, suave y lineal. Contra el fondo blanco de las paredes, el mobiliario de Arclinea amplifica el espacio luminoso.
En el centro de la cafetería se encuentra la araña «Peggy», diseñada para este espacio y creada por Vistosi. El equilibrio perfecto de la araña, en torno a su doble eje, está creado por una serie de esferas de vidrio y metal soplado que hablan de un enfoque modernista del espacio, donde la luz es el punto focal, y proporcionan un enfoque racional y elegante para interpretar el negro en polaridad con el blanco.
Grandes retratos fotográficos de Peggy Guggenheim cuelgan de las paredes, ofreciendo así a los visitantes una perspectiva íntima de la vida y el hogar del gran coleccionista, que vivió aquí desde 1948 hasta su muerte en 1979. Estas fotografías son un homenaje al carisma de Peggy y su influencia en la historia del arte del siglo XX.
Cuestión de creación
Un espacio culinario no ha sido terminado hasta que el chef no deja su sello. Alessandro Varagnolo ha dado vida a una carta revolucionaria por su simpleza y creatividad, siempre alineada con la intencionalidad del espacio general. «El Museum Cafe me permite crear platos que no son muy elaborados, sino que siempre son originales y sabrosos gracias a la audiencia internacional y en constante cambio que nos visita», cuenta.
¿Cuál es tu primer recuerdo relacionado con la cocina?
Mi madre preparando el almuerzo del domingo
¿Cómo se comía en tu casa cuando cuando eras niño?
Se confiaba en la sencillez casera, basada en una buena pasta con tomate y guisos.
¿Qué ingredientes odiabas en ese momento?
La pasta en caldo
¿Cómo afectan tus diferentes experiencias de vida a tu cocina?
La cocina logra aligerar cada momento complicado de la vida y hacer que los hermoso sea más colorido. Mi vida está impregnada de cocina y veo todo bajo su prisma, de modo que creo que todo aquello que vivo, inexorablemente lo llevo a ella.
¿Cómo se construye un líder de cocina?
Se necesita mucho pulso, pero también amabilidad y empatía. Siempre tiene que estar a la vanguardia con los nuevos métodos de cocina, mantenerse al día con las tendencias actuales sin romper con su propio estilo.
¿Cuál es el impacto del hecho de trabajar en un espacio artístico?
El entorno de la Colección Guggenheim me inspira en la presentación de los platos y en la creación de nuevas combinaciones. Construyo mi estilo día a día, siempre siendo fiel a mi tradición culinaria, pero siguiendo el ritmo de la solicitud del comensal y las nuevas tendencias
¿Dónde cree que están?
Creo que la apertura a la contaminación internacional de alimentos solo puede ser beneficiosa para la cocina de un pueblo. ¿Qué desafíos enfrentará en su lugar todos los días? Siempre mejorar, innovar ¿Puede identificar con 10 adjetivos el estilo de cocina que se encuentra en su restaurante? Innovador, profesional, tradicional, saludable, aromático, controlado. ¿Podría hablar sobre 5 ingredientes o preparaciones que le gusta comer? Pasta, verduras de temporada, aceitunas, dulces en general, mariscos.